Terminé mi último proyecto, una funda para llevar el libro. Sí, ya sé que no es nada nuevo, pero tenía muchas ganas de hacer una desde diciembre cuando ví el que Keka (qué manos tiene!!) le regaló a Gemma, caprichosilla que es una. La tela que he usado la compré con Mercedes en Dechado hace casi medio año y ha estado guardadita hasta ahora (como muchas otras cosas). Es un lino estampado de Yuwa imitando el punto de cruz. Le he puesto, bueno lo llevé al zapatero para que lo hiciera él, unas asas pequeñas de cuero y cuando lo coges parece un bolso de verdad.


Es una tela fantástica porque te permite, como he hecho, bordar siguiendo el dibujo. Utilizé dos colores para el bordado, el crudo y un rojo, además de una cinta rústica.


Para que el marcador de páginas tuviera un poco más de peso me pasé por mi tienda de cuentas habitual y encontré esta piedra que me parece super chula y creo que le va muy bien de color.

Todavía me queda más tela así que quizá haga otra fundita porta-libros y me la quede yo porque ésta que os he enseñado es para un regalo.